Hay varias teorias sobre la procedencia del nombre "Alpujarra", entre las que está la que lo hace provenir de uno de los primeros colonizadores musulmanes de la comarca, «Albujarra»; pero la opinión de muchos filólogos se decanta por el significado de «alba sierra». Sobre la procedencia de algunos nombres de pueblos y lugares de la Alpujarra Granadina hay que destacar el origen mozárabe, aunque la terminación de muchos de estos nombres, parecida a formas gallegas, han hecho creer popularmente que se trata de pueblos repoblados por gallegos, cuando la realidad es que el origen de su nombre es mucho más antiguo y las terminaciones en -eira son comunes al mozarabe sureño (por ejemplo: Capileira, Pampaneira, Poqueira...).
El accidente más importante de la comarca es
Sierra Nevada, que ofrece el límite norte de la región. Tuvo anteriormente distintos nombres, como "
Orospeda", "
Solaria" o "
Solair". Sierra Nevada es un marco incomparable desde un punto de vista geográfico y climático que se puede apreciar desde diversos puntos de La Alpujarra. En esta sierra se encuadran importantes cumbres, destacando el
Mulhacén, el más alto de la
Península Ibérica al que se encarama la localidad de Trevélez, y el
Veleta al que suben escalonadamente Pampaneira, Bubión y Capileira.
Se trata de una comarca con una importante protección como Patrimonio Histórico, al tener declaradas como
Bien de Interés Cultural dos amplias zonas de la misma: El
Conjunto Histórico del Barranco del Poqueira y el Sitio Histórico de la Alpujarra Media y La Taha conformando entre ambos, que son limítrofes, el espacio protegido patrimonialmente más amplio en Europa.
Entre los escritores que se han dedicado a esta región hay que destacar a dos. El primero es el hispanista inglés
Gerald Brenan, el cual inmortalizó la localidad de Yegen (Alpujarra de la Sierra). Para conocer esta región, su evolución y significado, es imprescindible leer «
Al sur de Granada», obra que realizó entre los años 1920 y 1930 desde la residencia que tenía en el pueblo de Yegen.
El segundo autor en importancia es Pedro Antonio de Alarcón escritor de Guadix que llevó a cabo, cincuenta años antes, un viaje por la comarca, con el resultado final de su libro «
La Alpujarra».
Algo que impresiona a todo viajero que llega a esta comarca es la
arquitectura de sus pueblos. Son núcleos de
calles estrechas, torcidas, empinadas y adaptadas a posibles
nevadas, con la característica de la
privatización del
espacio público, mediante
los tinaos. Los
terraos (cubiertas planas), están hechos con
launa, una
arcilla impermeable abundante en la comarca, extendida sobre el
cañizo o sobre losas de
piedra o de
pizarra, soportadas por
vigas de
madera. En los meses de
otoño e
invierno, pueden verse
mazorcas de
maíz u otros productos de la tierra extendidos sobre estos terraos para su secado, o
ristras de
pimientos colgadas junto a las ventanas o en algunas chimeneas. También destacan los
tinaos, lugares públicos de tránsito, bajo espacios privados. Otro aspecto original de la arquitectura de estos pueblos es el de las variopintas
chimeneas, de formas piramidales y cilíndricas, que tienden a funcionar gran parte del año. Un elemento a destacar es la
artesanía alpujarreña, que se puede considerar heredera de los pueblos que habitaron la comarca en el pasado:
mozárabes, árabes, bereberes, moriscos, etc. Lo más importante y que conserva mayor tradición es la confección de
tejidos, especialmente jarapas. En los últimos años se han instalado en la comarca numerosos talleres de artesanía que, además de los telares, han relanzado la cerámica e incluso la orfebrería. Esto ha hecho que numerosos artistas y artesanos, junto a músicos, pintores y poetas hayan escogido la Alpujarra Granadina como lugar de residencia.
BUBIÒN, PUEBLO ALPUJARREÑO.
Conozco bien la zona desde hace bastantes años y muchos tipos de alojamientos y sobre éste en cuestión, quedamos muy satisfechos, a la llegada nos encontramos una casa muy limpia y cuidada, un gran salón con cocina tipo americana con su barra y todo, parece que estás tomando cervezas en un mesón típico. Las vistas son espectaculares, con una gran terraza que la verdad no llegamos a disfrutar por la época del año que estuvimos. Los dormitorios muy amplios y con un gran baño junto a ellos en la planta baja, en la superior un aseo que viene muy bien junto al salón. La calefacción por radiadores, funciona con leña que te proporciona Encarnita su propietaria y debes tener encendida para mantener la casa caliente, no os esperéis 21º grados, es un alojamiento rural y no el piso de la capital. Particularmente, sobre todo, lo que más hemos valorado y conociendo lo que te puedes encontrar, es el acceso en coche hasta la misma puerta de la casa, que además, te permite bajar las cosas y aparcar luego en un aparcamiento de tipo disuasorio a poco más de 100 metros, todo un lujo, os lo aseguro. Por lo demás, la propietaria es discretamente amable, servicial y confiada.
ResponderEliminarLa zona es sencillamente espectacular y muy recomendable para venir a conocerla o simplemente....repetir.
Un saludo.